26/8/08


Nos rendimos los dos a fingir como tontos que él era mi marido y yo era su
mujer,
pero al cabo de un tiempo
yo no quería ser su esposa y el quiso volver a
ser el hombre infiel
. Ahora él esta feliz volvió con la idiota yo recorro las
calles buscando otro hombre, aprendí que mentirse tiene patas muy cortas que
siempre la costumbre va a matar al placer, va a matar al placer no no no
...

No hay comentarios: